El Parador de Melilla confirma que comenzará con las obras de accesibilidad

El director del Parador de Turismo Don Pedro de Estopiñán de Melilla, Jesús López Palomero, ha confirmado, a través de una carta dirigida al Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de Melilla (Cermi Melilla), que está previsto que comiencen las obras de accesibilidad en sus instalaciones próximamente, tras haber recibido su solicitud de que cumpla con las condiciones de accesibilidad.
Así, el Parador de Melilla ha puesto en conocimiento del Comité Autonómico que la primera fase de estas obras comenzará en el mes de septiembre, habiéndose adjudicado su ejecución el pasado 12 de julio a una empresa constructora.
En este sentido, según ha expuesto, “estamos ahora con las gestiones de obtención de la oportuna licencia de obras que nos permita comenzar con dicha adaptación, siendo el plazo de ejecución de 42 días naturales desde el comienzo de las obras”.
“La adecuación en accesibilidad de la Red de Paradores de Turismo de España es uno de los objetivos estratégicos de esta compañía pública, la cual se está llevando a cabo progresivamente en todos los Paradores realizando proyectos arquitectónicos especialistas en esta materia”, ha destacado.
Previamente, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) Estatal había trasladado al presidente consejero delegado de Paradores de Turismo, Miguel Martínez Fernández, una petición en relación con la accesibilidad del Parador de Melilla, ubicado en esa ciudad e integrado en la red de paradores que preside Miguel Martínez.
Por su parte, el Cermi Melilla también venía reclamando desde hace tiempo al Parador de Melilla la corrección de las deficiencias de accesibilidad que presenta el Parador, trasladándole que se adecuara el establecimiento emblemático que representa el Parador, “de forma que sea un edificio accesible que facilite el acceso a todas las personas que se acerquen a la ciudad o que deseen celebrar cualquier evento en los salones del mismo”.
“Es un hecho que un edificio emblemático requiere que todas las personas puedan disfrutar de él en igualdad de oportunidades, sobre todo, cuando se trata de una red pública que debiera ser ejemplar a este respecto”, explicaba el Comité regional.